El enunciado nos muestra un caso de un paciente con dolor pleurítico de una semana de evolución asociado a tos y febrícula. Además, tenemos una PCR elevada y un dímero D muy elevado.
De cara al MIR siempre cuando tengamos un dímero D tan alto tenemos que pensar en un TEP. Recordar que pasados 3-4 días de inicio de la clínica, se pueden objetivar infartos pulmonares lo que suele causar el dolor pleurítico y la febrícula así como elevación de PCR (cualquier proceso inflamatorio la eleva no implica infección como ya sabéis).
Si miramos la imagen nos centraremos más en el DD de las opciones que nos muestran:
TEP: los infartos pulmonares se muestran como en la imagen. Vemos una joroba de Hampton: una zona hiperintensa de forma triangular en la periferia pulmonar puesto que corresponde a una zona vascular terminal.
Neumonía: Las condensaciones también siguen la forma de los lobulillos, pero en ese caso suelen ser más amplias dibujando un lóbulo entero (además, no elevaría dímero D, de forma general).
Cáncer de pulmón: por norma general, ya sean lesiones periféricas o centrales la forma es más redondeada como una masa no una forma tan geométrica perfecta (también puede dar febrícula y elevación de PCR, pero igualmente un aumento del dímero D sería excepcional).
Derrame encapsulado: en este caso lo que veríamos es el signo de la embarazada, es decir, una hiperintensidad con márgenes bien definidos y ángulos con el parénquima obtusos redondeados, no una forma tan geométrica como tenemos en la imagen (además si nos fijamos bien el ángulo inferior con la pleura es agudo).
Si os ha gustado la explicación podréis encontrar todo el temario de Neumología en esquemas y pequeñas tablas diagnósticas AQUÍ